La serie Noir nos presenta a los personajes Marvel en un universo distinto, historias de género negro en los años 30. En este caso, vemos a Lobezno covertido en un detective en un barrio de Nueva York. Un tipo duro que esconde un pasado oscuro y que se verá enfrentado a él.La verdad es que la historia cae en todos los tópicos posibles, empezando por el detective de poca monta que se ve envuelto en un caso que lo supera y que le trae los fantamas de su pasado. Todo lleno de clichés y sin continuidad, como dando saltos. Una lástima. Además tenemos el problema del dibujo, tan oscuro y entintado que hay páginas que dan la sensacion de haber tirado sobre ellas un tintero completo. No ayuda a que te enganche la historia porque no puedes apreciar bien a los personajes.
En definitiva, un buen experimento pero que como casi siempre no sale bien.